Los
eucaliptos son árboles perennes, de porte recto. Pueden llegar a medir más de
60 metros de altura, si bien se habla de ejemplares ya desaparecidos que han
alcanzado los 150 metros.
La
corteza exterior (retidoma) es marrón
claro con aspecto de piel y se desprende a tiras dejando manchas grises o
pardinas sobre la corteza interior, más lisa. Los bosques de eucaliptos pueden
crear problemas de incendios incontrolables debido a la gran altura que
alcanzan estos árboles en poco tiempo de crecimiento y a la fácil combustión de
su madera: en bosques densos de eucaliptos, las llamas de un incendio pueden
alcanzar más de 300 metros de altura, como se ha podido comprobar en Australia
durante la época de sequia.
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Las
hojas jóvenes de los eucaliptos son sésiles, ovaladas y grisáceas. Estas se
alargan y se tornan de un color verde azulado brillante de adultos, contienen un aceite esencial de
característico olor balsámico, que es un poderoso desinfectante natural. En
aromaterapia se emplea por la parte emocional como un estimulante con efecto
despejante y por la parte física como antiviral expectorante y nasal.
El
aceite esencial de eucalipto es usado
como descongestionante y para combatir infecciones respiratorias. Se
utiliza en forma de ungüento, en pastillas, jarabes o en vaporizaciones. El
aceite se usa de forma tópica como tratamiento para dolores musculares y de
articulaciones, así como para tratar el herpes labial.
En
España el eucalipto fue introducido en Galicia en 1860 por Fray Rosendo
Salvado, misionero en Australia mediante el envío de semillas a su familia
en Tuy por su valor ornamental dado su
gran porte.
Posteriormente
se instalaron numerosos arboretos, dispersos por la geografía española para el
estudio y comparación de las diferentes especies.
Estas plantas se encuentran enfermas en estos momentos
Gracias
al Patrimonio Forestal de Estado se empleó una política de reforestación
mediante especies de crecimiento rápido, principalmente el pino y el eucalipto.
Lo cual llevó al aumento de la actividad forestal.
Los eucaliptos
son junto a los chopos, las especies más productoras en cantidad de madera
entre las que se utilizan en los cultivos forestales del país actualmente.
El
eucalipto se ha convertido en un árbol
muy investigado y polémico. Diversos estudios comparativos han llegado a la
conclusión de que la biodiversidad de las plantaciones se ve afectada y que la
mesofauna del suelo es más pobre en plantaciones de eucaliptos que en bosques
autóctonos españoles, en plantaciones de pino marítimo (pinos pinaster) y en
alcornocales.
Asimismo
éstas plantaciones intensivas son una amenaza para muchos anfibios y reptiles ibéricos “en la medida
que suponen la alteración o pérdida de
la vegetación autóctona y modificaciones importantes en la dinámica de los
ecosistemas originales”.
Colinas, vista desde la carretera.
Muy
cerquita de nosotros podemos encontrar numerosos ejemplares de eucaliptos
blancos, se pueden encontrar a partir de
donde está Colinas, en Puebla del Rio y sus alrededores.